¿Por qué es importante consumir granola?

Después de pasar tantas horas sin ingerir alimentos mientras duermes, es fundamental iniciar tu día con un desayuno rico y saludable que te de la energía que necesitas. Y la granola es una opción genial.
Mientras dormimos el cuerpo pasa muchas horas sin alimentos y al despertar es necesario reponer todo ese combustible que el organismo necesita para funcionar de forma óptima.
La granola es un alimento cuya base se realiza con frutos secos (almendras y/o nueces), avena, mezclado con miel y horneado hasta quedar crujiente. Adicionalmente, se le suelen agregar semillas (trigo, pepitoria, linaza, sésamo) y frutas deshidratadas (pasas, dátiles, coco, arándanos).
La granola tiene un importante contenido de fibra y grasas saludables que aportan mucha saciedad. Es decir, no hace falta comerla en mucha cantidad para controlar el apetito. También tiene muchas vitaminas, minerales y antioxidantes que ayudan a proteger al cuerpo de los radicales libres. Es un gran sustituto para los cereales comerciales azucarados. Además, es muy fácil de preparar en casa.
Su origen se remonta a las últimas décadas del siglo XIX en Estados Unidos, cuando James Caleb Jackson inventó una mezcla de avena que llamaría “granula”, pero, a diferencia de la que consumes, el cereal no estaba horneado así que se le agregaba agua o leche para digerirlo.
Con el tiempo la receta se replicó y llegaría a México, en donde Granvita le daría su propio toque horneando las hojuelas y agregando ingredientes naturales de la región, como papaya, pepitas, amaranto, coco, entre otros; los beneficios de la granola se hicieron tan populares que por eso nunca falta en los desayunos saludables.
Vitaminas
La granola posee una importante cantidad de vitaminas que obtendrás gracias a la variedad de ingredientes, tal como la vitamina E, necesaria para la creación o recuperación de los tejidos dañados a causa de infecciones o padecimientos, también es importante para reforzar el sistema inmunitario. Otros elementos que tiene la granola son la tiamina y folato, pertenecientes a la vitamina B, estos dan energía al metabolismo, regulan funciones del sistema nervioso y si estás embarazada te ayudarán para que tu bebé se desarrolle saludablemente.
Minerales
¡La granola es una bomba de minerales!, con una cucharada vas a tener magnesio, que sostiene las funciones musculares, es otro refuerzo para el sistema inmunitario y fortalece los huesos; fósforo, importante en la formación de huesos, producción de proteína y el movimiento de los riñones. Además, tiene alto contenido en selenio, zinc, cobre y manganeso, que en conjunto ayudan a que la sangre corra adecuadamente por tu cuerpo, mantiene el control de tu corazón e incluso regula las funciones de la tiroides, esencial en el proceso metabólico; por todos los minerales ya mencionados los beneficios de la granola son asombrosos, pero aún faltan más. Una barrita o un plato de granola es rico en fibras y nunca falta en las dietas, ya que te dará la saciedad necesaria para que no pierdas tu objetivo saludable, lo anterior se debe a que la avena es una fibra soluble que al entrar al estómago se absorbe lentamente y, a la par, agiliza el funcionamiento de los intestinos; ahora que lo sabes, brindale a tu cuerpo estos beneficios para la salud.
Grasas saludables para tu corazón
Cuando la avena, las almendras y las nueces se mezclan ocurre algo fantástico: en primera instancia ayudan a reducir tus niveles de colesterol y de presión arterial, dos cosas que tu corazón agradecerá; si padeces alguna inflamación esta va a disminuir gradualmente, también recibes omega 3, un ácido graso que estimula las funciones cerebrales.
Después de presentarte algunos de los beneficios de la granola seguramente ya se te hizo agua la boca, prepárate para empezar tu día de manera excelente.
Fuente: https://www.ecoportal.net/alimentacion/alimento-estrella/los-beneficios-comer-granola/
GRANOLA CASERA

INGREDIENTES:
4 tazas de avena en hojuelas
1/2 taza de nueces picadas
½ taza de almendras picadas
1/2 taza de miel
1/2 taza de linaza no molida
1/2 taza de ajonjolí
½ taza de pepitoria
2 cucharadas de canela en polvo
1 cucharada de vainilla
2 tazas de frutos deshidratados (pasas, coco, arándanos, papaya, piña)
PREPARACIÓN:
En un bol pon la avena, las nueces, las almendras y la linaza, la pepitoria. Revolver bien, agregar la miel, canela y vainilla y mezclar bien.
Esparce esta mezcla sobre una lata de horno empapelada con papel aluminio y lleva a horno pre calentado durante 20 minutos. A 180 C. A la mitad del tiempo, remueve la mezcla. Una vez pasado el tiempo, saca del horno, agrega los frutos deshidratados y las semillas de ajonjolí, revuelve bien y deja enfriar.
Guarda en un recipiente que quede bien sellado, y a disfrutar.
